Ayer conocimos el auto del Tribunal Supremo que paraliza la exhumación de Franco que había aprobado el Consejo de Ministros. Decisión del Gobierno que, no se nos olvide, era dar cumplimiento a un mandato del Congreso.
El TS, en su auto, demuestra que el franquismo sigue implantado en las más altas instancias del, supuesto por lo que se ve, estado democrático que es el Reino de España.
Con profundo desprecio a la democracia, el auto del alto tribunal, legitima y legaliza el golpe de estado fascista que protagonizó Franco contra el legítimo y constitucional Gobierno de la II República.
El legítimo Jefe de Estado en Octubre de 1936 era D.Manuel Azaña. Franco fue aupado a la «jefatura del estado» por los rebeldes facciosos y tan solo lo fue en los territorios que controlaban los rebeldes.
De hecho la Constitución Republicana no se derogó hasta el 1 de Abril de 1939, que fue cuando finalizó la guerra con la victoria de los sublevados que, hasta ese día, eran rebeldes contra el estado de derecho y el gobierno legítimo.
Ahora sale el TS y, por unanimidad, legitima el golpe de estado y a quien lo encabezó. El TS se pone a la altura de Hitler y Mussolini que fueron los únicos jefes de estado que reconocieron a Franco como jefe de estado mientras duró la guerra provocada por su sublevación.
Sabíamos que todo quedó «atado y bien atado». Este auto lo confirma y, para vergüenza nuestra, demuestra que el franquismo no acabó, que sigue presente, que toma decisiones, que cambia la historia según sus intereses y que afecta a nuestros derechos.
Inaceptable y vergonzoso. Quienes, por unanimidad, suscriben este auto, deben ser cesados de inmediato porque es evidente que no van dimitir.

Imagen. Fragmento del auto en el que aparece lo que denunciamos