Hoy, en el 85 aniversario de su asesinato, rendimos sincero homenaje y emotivo recuerdo a las 56 personas que, la madrugada del 5 de Agosto de 1939, el odio asesino franquista fusiló en las tapias del madrileño cementerio de La Almudena.

Cuando nos han sustituido la Ley de Memoria Democrática de Aragón, por ese plan de falsa Concordia, es necesario recordar que 13 mujeres y 43 hombres, fueron asesinadas y asesinados por defender la libertad y plantar cara al franquismo.

Fueron 56 jóvenes, 56 compañeras y compañeros, que como tantas y tantos otras y otros, murieron a manos de ese régimen asesino que fue el franquismo. 13 Rosas y 43 claveles, flores rotas, flores rojas como la sangre derramada por las balas asesinas.

La condena a muerte fue dictada por el Consejo de Guerra Permanente que el franquismo había creado como órgano de “legitimación” de la represión y para juzgar a todas aquellas personas que no mostrasen adhesión inquebrantable a quienes vencieron en la guerra.

En una burla cruel las 13 Rosas y los 43 claveles fueron declarados “responsables de un delito de adhesión a la rebelión”. Lo hicieron quienes habían protagonizado la sublevación militar contra el legítimo Gobierno de la II República que, tras su victoria en la guerra, se permitían acusar de rebeldía a quienes no aceptaban la dictadura impuesta por las armas.

La condena a muerte de estas 56 personas también fue interpretada como un acto de venganza franquista por el atentado que, unos días antes del juicio, había costado la vida al comandante Isaac Gabaldón, su hija y su chófer. Aunque nunca llegó a conocerse la autoría del atentado, el régimen franquista lo consideró una desafiante provocación y decidió dar un castigo ejemplar a quienes se intentaban organizar en grupos de resistencia. Las 13 mujeres fueron elegidas, al azar, de entre los cientos de mujeres que había en la cárcel de Ventas. De ellas 9 eran menores de edad pues no habían cumplido los 21 años. Las 13 jóvenes, junto a los 43 hombres, fueron fusiladas aquel 5 de Agosto.

Hoy, en el 85 aniversario de su asesinato, cuando el asesinato de 56 defensoras/es de la libertad y la democracia, como tantos y tantos otros, sigue esperando Justicia y Reparación, cumplimos con su derecho a ser recordadas y recordados y con el nuestro a conocer y a no olvidar. Hoy, una vez más, denunciamos el revisionismo del Gobierno del Sr. Azcón que, aunque ha sido repudiado por VOX, mantiene ese vergonzoso plan de Concordia, que obvia el franquismo y sus crímenes, que reescribe la historia y que insulta a las víctimas de una dictadura asesina.

Hoy, como siempre, nos reafirmamos en nuestro compromiso con la Verdad, la Justicia, la Reparación y la Memoria Democrática.